¿Quieres escribir un guion audiovisual y no sabes por dónde empezar? Existen varias formas de inspirarte y que empieces a crear una historia. Sin embargo, una de las más divertidas es el generador de ideas, porque te permite organizar tus ideas y explorar posibilidades que quizás no habías considerado y que pueden expandir tus horizontes.
¿En qué consiste el generador de ideas?
Para hacerlo necesitas cortar varios papelitos que luego agregarás en una bolsa. Vas a hacer tres paquetes, los cuales tendrán lo siguiente: personajes, verbos y objeto.
Luego de hacerlo, elige de cada bolsa un papel. Podría salir algo así:
Adolescente – protege – anillo
Si lo notaste, esas tres palabras forman un personaje muy conocido de la literatura y el cine: Frodo Bolsón de El Señor de los Anillos. No necesariamente así nació la idea de esa película en particular, pero si captas la dinámica del juego, podrás sacar bastantes ideas para crear un personaje con una motivación.
¿Qué viene después de generar ideas?
Si ya hiciste el intento, ahora la pregunta es ¿qué voy a hacer con las ideas? Bueno, puedes empezar a expandir la historia mediante una ficha de personaje. Si conoces los juegos de rol, tal vez te resulte conocido, pero aquí te explicamos más o menos qué debería ir:
- Dibujo o describir las características físicas del personaje (Flaco/a, gordo/a, alto/a, bajo/a,etc)
- Descripción de su personalidad
- Las habilidades del personaje
Con esto ya tienes un personaje mejor formado. Ahora, debes tener en cuenta tanto el verbo como el objeto, y escribir una breve reseña histórica del personaje, que permita explicar cuáles son las motivaciones del personaje. De este modo estaremos hilando la relación entre los tres elementos. En este punto puedes darle rienda suelta a la imaginación,
A definir la historia
Teniendo esos tres elementos ya constituidos, ahora podrás empezar a definir una historia. Agrega más personajes (puedes crearlos incluso del mismo modo), agrega obstáculos, enseñanzas u otros elementos que consideres pueden enriquecer la historia.
¿Lo hiciste? ¡Ya tienes un brief! Ahora el reto está en empezar a construir un guion audiovisual. Lo importante es que ya tienes un concepto armado, y desde ahí podrás seguir trabajando. Haz dado un primer paso.